De la lata al plato: conservas de pescado
Hoy hablamos sobre las propiedades nutricionales de las conservas de pescados y mariscos, los beneficios que aportan a nuestra salud y su importancia en nuestra dieta cotidiana.
Los pescados son una excelente fuente de proteína de calidad, aportan calcio, contienen ácidos grasos omega 3 ("grasa buena") y menos colesterol que la carne. Cuando no es posible comerlos frescos, las conservas se pueden utilizar como complemento de una dieta saludable para toda la familia, ya que su consumo está recomendado con una frecuencia de entre 3 y 5 veces por semana.
Además, pese al desconocimiento de la mayoría, su valor nutricional es muy elevado, hasta el punto de que casi iguala al del pescado fresco. Y a pesar de la creencia popular, no contienen conservantes, dado que el proceso de esterilización al que son sometidas basta para mantener el producto en cuestión en perfecto estado hasta su posterior consumo.
Los expertos coinciden en que sus principales beneficios son:
Saludables: Las conservas son beneficiosas para el sistema cardiovascular y óseo. De su consumo obtenemos, proteínas, ácidos grasos, omega 3 y Vitaminas A y D.
Sabrosos: Las conservas, además de estar ricas, son el acompañante principal de gran cantidad de recetas por lo que son un elemento muy versátil en la cocina.
Naturales: Los pescados y mariscos se capturan, e inmediatamente después se inicia el proceso de conservación sin la utilización de conservantes.
Económicos: Las conservas son un aliado excelente de la cocina cotidiana a precios muy agradecidos. Y siempre disponibles, nunca están fuera de temporada.
Cómodos: La conserva es práctica, cómoda y rápida. Se pueden disfrutar en cualquier lugar en un abrir y comer.