Cuáles son las diferencias entre el jamón de reserva y el de bodega
Aunque existen diferencias significativas entre los diferentes tipos de jamones, lo cierto es que gran parte de la población no sabría decir las diferencias reales entre unos y otros a la hora de elegir qué jamón comprar.
Es algo con lo que hay que
tener especial cuidado porque los precios son muy diferentes y pueden intentar
vender un jamón de bodega como si fuera uno de reserva. Los jamones etiquetados
como “Bodega” deben pasar al menos 9
meses de periodo de curación mientras que los jamones etiquetados como “Reserva” deben estar al menos 12 meses.
Esta es la diferencia principal a la que debemos prestar atención y que hay que buscar en su etiquetado. En el caso de las paletas, los periodos de curación serán de 5 y de 7 meses respectivamente.
En el resto de factores importantes, como la elaboración y el tratamiento de los jamones suele ser prácticamente el mismo. Comenzando por el salado, continuando por el asentamiento y con la curación en sí misma.
Clasificación para el cerdo blanco vs
cerdo ibérico
Esta clasificación es solo aplicable a los jamones del cerdo
blanco y no al jamón ibérico, ya que este cuenta con su propia normativa en
materia de clasificación de jamones y su identificación de cara al público.
En cualquier caso resulta conveniente conocer que un jamón de reserva ha estado más tiempo en curación que uno de bodega y que eso puede influir en el precio final del mismo. Tener claro que para que sea considerado “Reserva” tiene que haber estado al menos un año de curación es muy importante para evitar posibles estafas en el mercado.
Además existen los jamones “Gran Reserva” cuyo periodo de curación es el mayor, ya que dura al menos 15 meses y son quizás los más demandados por tener una mayor calidad.